Una escuela donde el juego lo es TODO
Llegué a Kakegurui con las expectativas a tope, después de ver tanto hype por ahí. La premisa es sencilla, pero adictiva: la Academia Privada Hyakkaou, un lugar donde los hijos de la élite se enfrentan en un despiadado sistema basado en el juego. Olvida la inteligencia, las calificaciones y los libros; aquí, tu valor se mide por tu habilidad para apostar, ganar... o perderlo todo. Y créanme, perderlo todo tiene consecuencias bastante... interesantes.
El As en la Manga: Yumeko Jabami
La protagonista, Yumeko Jabami, es un huracán de locura y apuestas. No le interesa el dinero, ni la fama, ni el poder... a ella le encanta el thrill de la partida, la emoción pura de jugarse todo. Su sonrisa inquietante y su mirada penetrante son lo primero que te atrapan, pero su habilidad para analizar a sus oponentes y su don para el juego son lo que realmente te dejan con la boca abierta. Es un personaje fascinante, aunque a veces un poco... imposible.
¿Sobrehumana o simplemente buena jugadora?
Aquí viene la parte donde muchos van a estar en desacuerdo conmigo. A Yumeko la acompaña una suerte, digamos... *excesiva*. Hay momentos donde parece que tiene un don sobrenatural para ganar, lo que resta un poco de tensión a algunas partidas. Si bien esto puede ser un punto negativo, también le da un toque de fantasía que algunos pueden disfrutar, aunque a otros les parezca un poco frustrante. La verdad es que yo lo veo como parte de la personalidad exagerada del manga, que no se toma a sí mismo demasiado en serio.
Más allá del Juego: Personajes y estética
Aparte de Yumeko, el resto del elenco es una mezcla explosiva de personajes extravagantes. Desde estudiantes ricos y arrogantes hasta los que se debaten entre la desesperación y la avaricia, cada uno tiene su propia historia y motivaciones. El diseño de personajes es llamativo, con un estilo visual que se acerca al anime en su extravagancia. Los diseños son creativos, y las expresiones exageradas en los momentos de tensión o euforia hacen que la lectura sea muy dinámica y entretenida.
Un estilo visual impactante
El arte es un punto fuerte de Kakegurui. Los diseños de personajes son memorables y el uso del color es atrevido y expresivo. El estilo es llamativo y se adapta perfectamente a la atmósfera frenética y a veces oscura del manga. Aunque no es un estilo realista, sí que transmite de forma efectiva las emociones y la tensión de cada partida.
¿Recomendación final? ¡Un rotundo sí!
A pesar de algunas pequeñas pegas, como la suerte exagerada de Yumeko en ocasiones, Kakegurui es una experiencia de lectura adictiva. Su premisa única, sus personajes extravagantes y su estilo visual vibrante hacen que sea una lectura muy recomendable para aquellos que buscan algo diferente y emocionante. Si te gustan los mangas con mucho drama, giros inesperados y personajes complejos, definitivamente tienes que darle una oportunidad. ¡No te arrepentirás!